En el 2011, Colin y Christine Weir de Escocia ganaron 161 millones de libras en Euromillions y se pusieron como sobrenombre “los quisquillosos rosas” debido a su buena suerte. A diferencia de muchos otros ganadores del premio gordo, Colin, un cámara man de televisión retirado a los 71 años, y Christine, enfermera de 62 años, optaron por salir al aire haciéndose famosos de un día para otro. Hablaron sobre cómo ayudar a su familia, dar un poco de dinero a organizaciones benéficas o de caridad, así como de disfrutar de su jubilación con unas vacaciones increíbles.
Sin embargo, después de ocho años, la pareja anunció que se divorciaría después de haber estado separados por un par de años. Pero… ¡¿Deberíamos de estar realmente sorprendidos de esto?!
Estadísticamente, los ganadores del premio mayor de la lotería son un 3% más propensos a divorciarse a los 2 años de haberse hecho ricos, por lo que el “cliché” del ganador de lotería de mediana edad que abandona a su esposa por una stripper o prostituta de tan solo 21 años, no es del todo cierto.
Esta semana, en la oficina tuvimos un debate sobre cómo el dinero puede cambiar a las parejas. Todos alguna vez hemos visto estas parejas ganadoras de lotería que dicen que quieren gastarse una fortuna en sus vacaciones, pero ¿qué pasa si la idea de vacaciones del esposo es irse a Las Vegas y la de la esposa es pasar una semana en una playa desierta en el Caribe? En el momento en que tienes dinero casi ilimitadamente, puedes vivir tus sueños a tu antojo… Pero, ¡¿podría eso mostrar que tan diferente una pareja puede ser?!
Sea lo que sea, decidir qué hacer con tanto dinero es el mejor de los problemas que alguien podría tener. Por cierto… ¡Este fin de semana seguimos jugando Powerball!